martes, 9 de junio de 2015

Rafael Van der Vaart será un buen fichaje para el Betis

Parece que el primer fichaje del Real Betis para la temporada 2015-16 tiene nombres y apellidos: Rafael van der Vaart. Como entre el beticismo es costumbre, se ha abierto el debate sobre si es un buen fichaje o no.
Los argumentos que dicen que no será un buen fichaje son su edad, 32 años, y otro un poco más difícil de sustentar, porque es más una suposición que otra cosa. ¿No será un nuevo Verdú?
No puedo decir nada sobre la edad, tiene 32 años. Indudablemente no está ya en su plenitud, pero ¿discutiría alguien el año que viene a Molina o Rubén Castro? Pues es incluso más joven que el canario.
Sobre el tema de Verdú hay muchas más cosas que decir. Ningún bético pensaba, cuando se hizo oficial el fichaje del catalán, que era un mal fichaje, Más bien todo lo contrario. Luego fue un fiasco, desde luego, pero amigos, comparar al holandés con el catalán, es como comparar la noche y el día. Van der Vaart ha sido más de 100 veces internacional con Holanda, y ha jugado como titular en el Ajax, en el Tottenham, en el Madrid, con algo menos de regularidad, y en el Hamburgo, ¿Son realmente comparables ambos currículos? La respuesta es clara, NO.
Todas las comparaciones son odiosas, pero sin ir más lejos el Sevilla ha anunciado el fichaje de Krohn-Dheli. Para mi gusto un gran fichaje, pues bien, se trata de un jugador sólo unos meses más joven, y sin caer en forofismos, pese a la gran calidad del danés, me quedo como jugador con Rafael. 

No podemos ni debemos esperar un jugador que dispute los 38 partidos completos, pero si se dosifica, es un jugador que puede dar mucho porque calidad le sobra a raudales. El solo no dará el salto de calidad que necesita el Betis para competir, pero sin duda ayudará a ello. Tengamos paciencia, será un buen fichaje, si finalmente se confirma.

Seguro que el Villamarín disfrutará con el holandés

sábado, 7 de marzo de 2015

El Betis se tiene que posicionar ante los escándalos

Llevamos dos semanas donde se habla de casi todo menos del rival del Betis, y ahora toca ni más ni menos que el Valladolid. 
La acusación de la fiscalía a Rubén Castro, los dichosos cánticos, la implicación de jugadores del Betis en la presunta compra de partidos, y ya no quiero hablar del juicio interminable con Lopera. El Betis sale más en los medios de comunicación por temas que manchan nuestra imagen, que por logros deportivos, y eso me avergüenza.
El presidente Ollero se posicionó convenientemente con el tema de los cánticos, pero llegados a este punto eso no es suficiente. El Betis ha de tomar una actitud enérgica ante los hechos vergonzosos, independientemente que luego se confirmen o no. El Betis está por encima de todos los jugadores, llamen como se llamen, y ha de ser implacable aunque paguen justos por pecadores. No debemos ser más tibios porque uno de nuestros buques insignias, Rubén Castro, sea uno de los implicados en los escándalo.
El circuito a seguir debería de ser sencillo. Primero citar a las oficinas, si no lo han hecho ya, a Figueras y Rubén Castro. Preguntarles si son ciertos los delitos que se les imputa. En el caso que digan que no, rueda de prensa de los dos manifestando su inocencia. En esa misma rueda de prensa apoyo institucional del Betis, pero repulsa absoluta ante la violencia de género y la corrupción por compra de partidos. Compromiso de la entidad de si en el caso que se les declare inocentes, renovación de sus contratos, pero si no fuera así, en el segundo siguiente estarían fuera del Betis. Punto y final.
No se puede dejar ni un margen a que manchen nuestra entidad con cosas deleznables. Si otros equipos pueden vivir con el hecho que jugadores o mandatarios suyos sean delincuentes, allá ellos, el Betis no puede ni debe permitirlo.

Por el bien del Betis, Jordi y Rubén han de dar un paso adelante. Foto: Marca